Eficiencia energética en todas las computadoras y en una máxima expresión, o al menos eso se espera con la computación neuromórfica.
Los científicos han desarrollado circuitos de «neuristores» que se comportan de manera similar a las neuronas biológicas en el cerebro humano.
Con la computación neuromórfica se pueden realizar cálculos complejos utilizando una cantidad de energía increíblemente pequeña.
«Podría poner 5G y 6G en todas partes y asumir que tiene una conexión a Internet confiable todo el tiempo, o podría solucionar el problema con el procesamiento del hardware, que es lo que estamos haciendo»
Louis Piper, director de ciencia de materiales e ingeniería de la Universidad de Binghamton
La idea principal es crear computadoras que ahorren más energía, por lo que cosas como los drones podrían responder a su entorno sin preocuparse por una señal Wifi.
La electroformación, que es como funciona la tecnología, al igual que con Frankenstein, básicamente es pulsar bastante electricidad a través del material, y de repente se convierte en un elemento activo.
Esto es realmente diferente, no es tan confiable por ahora, pera es un paso de la ingeniería. Además, destacar que no es así como hacemos las cosas con transistores de silicio.
Intel apoya esta iniciativa, Intel Labs está impulsando la investigación en informática que contribuye a esta tercera generación de inteligencia artificial.
La computación neuromórfica abre nuevos caminos en la simulación cerebral, existen también algunos proyectos trabajando con ello.
La Dra. Sacha van Albada, utilizo una computadora neuromórfica conocida como SpiNNaker, para realizar una simulación cerebral a la par con los mejores resultados obtenidos en una supercomputadora convencional.
Los investigadores afirman que han logrado las primeras simulaciones a gran escala de un microcircuito cortical con escalas de tiempo biológicas.
El hallazgo encontrado en esta tecnología podría acelerar el camino hacia una computación más eficiente y adaptable.
Existe hasta ahora muy poca información de como van todos los avances, incluso se han promovido becas a quienes deseen unirse al estudio de la ciencia.
Para que quede claro, el objetivo de estas aplicaciones robóticas es diseñar una plataforma que pueda simular el cerebro en tiempo real.
Todo esto puede ser posible utilizando una fracción de la potencia de las supercomputadoras de hoy en día, eso trataría de obtenerse con la computación neuromórfica.
Cuando se menciona un cerebro, se debe tener en cuenta que es idealmente del orden de un cerebro real de 20 a 30 vatios.
Los bloques de construcción computacionales dentro de los sistemas de computación neuromórficos son lógicamente análogos a las neuronas.
Como muchos otros proyectos, SpiNNaker puede resultar el camino más práctico para lograr ese objetivo, hay que seguir de cerca la tecnología y compartir sobre ello.